El Hospital Joan XXIII fue pionero en España en la aplicación del método canguro en la Unidad Neonatal.

Este método mejora los resultados de salud de los bebés prematuros y favorece el vínculo afectivo con los progenitores.

El Hospital Joan XXIII celebró, el pasado viernes, treinta años de la puesta en marcha del método canguro en el Servicio de Pediatría, en un acto que contó con la participación de los promotores del método en el centro sanitario: los pediatras Adolfo Gómez Papi, Ricardo Closa, Teresa Baiges, y las enfermeras de pediatría Mar Ravés y Maria José Martínez.

La jefa de Sección de críticos pediátricos, Dra. Mar Albujar, presentó la jornada y a todos los ponentes, y afirmó que “el método canguro se ha convertido en un pilar básico del desarrollo de la familia”.

A continuación, el ex jefe de Servicio de Pediatría, Dr. Ricardo Closa, explicó cómo comenzó el método canguro. En primer lugar, hizo un emotivo recuerdo a pediatras como Pepe Caballero, Martín Mesonero y Xavier Allué. Closa explicó que en los años ochenta las unidades neonatales separaban a los prematuros de los recién nacidos y las familias no podían entrar. Además, explicó que “los ventiladores que utilizaban para los prematuros provocaban daños en sus pulmones y los bebés volvían al Hospital recurrentemente cuando cogían cualquier resfriado”. Después, en los años 90, cuando consiguieron mejorar el daño que provocaban los respiradores “es cuando pudieron comenzar con el método canguro”. En 1994 se inaugura la Unidad Neonatal del Hospital Joan XXIII, “la mejor del Estado” publicaba la prensa.

Posteriormente, la enfermera Ma José Martínez, habló de la “humanización de la atención, integrando a los padres y mejorando los cuidados”. Martínez explicó que se amplió el horario de visitas a 12 horas y que “una hora al día los padres podían entrar en la unidad acompañados de otras personas”. Respecto a los cuidados, se mejoró la atención con la incorporación del método canguro y del masaje infantil “para fortalecer el vínculo del bebé con sus madres y padres”.

La enfermera Mar Ravés, explicó que fueron a Colombia, lugar donde se comenzó a aplicar el método canguro que “ayudó a bajar las infecciones en Colombia, subió la tasa de supervivencia y que hubiera menos abandonos de niños”. Ravés explicó que cuando se empezó con el método en el Hospital Joan XXIII “el bebé estaba monitorizado antes, durante y después del método, y además, vigilábamos todas las conductas de los bebés y de los progenitores”.

Después, el Dr. Gómez Papi recordó a la primera niña, Estefanía, y su madre, María, que hicieron el método canguro en el Hospital Joan XXIII en 1994. También, al primer bebé, Joan, que “se agarró él solo al pecho de la madre”. El acto fue muy emotivo y contó también con familias con sus hijos pequeños.

El método canguro

El método canguro consiste en mantener al bebé desnudo, con gorro y pañal, sobre el pecho desnudo del padre o de la madre y cubrirle la espalda con una manta, con el objetivo de establecer un vínculo afectivo más estrecho entre el bebé y los progenitores a través del contacto físico. Se intenta iniciar este procedimiento lo antes posible, desde el nacimiento. Si el bebé está clínicamente estable, se puede llevar a cabo aunque necesite soporte respiratorio, catéteres, perfusiones o sondas, entre otros. Es recomendable que cada sesión del método canguro dure, como mínimo, una hora. Cuanto más prolongada sea, mejor, siempre que el bebé y el progenitor estén cómodos.

El método es sencillo, tiene poco costo económico y tiene numerosos beneficios —todos con evidencia científica— tanto para los padres como para los bebés. Las principales ventajas son: menos cantidad de infecciones, la temperatura que mantiene el bebé es tan buena como la de la incubadora, facilita la lactancia materna, disminuye los episodios de apnea y las necesidades de oxígeno, el bebé aumenta de peso y, en conjunto, hace que se estabilice y disminuya la estancia hospitalaria. Es una técnica que permite el desarrollo neurológico y emocional de los recién nacidos inmaduros.

El método canguro surgió en Colombia, en los años setenta, cuando la superpoblación provocó una falta tan importante de material y personal sanitario que hasta tres bebés prematuros tenían que compartir una incubadora. Para solucionar este problema, pensaron que se podrían utilizar las mismas madres de los bebés como incubadoras. Y así nació este método. Los resultados fueron tan buenos que hoy en día se ha convertido en la práctica habitual de las unidades neonatales de todo el mundo y es uno de los pilares fundamentales de los cuidados centrados en el desarrollo y la familia. Esta metodología de trabajo pretende lograr la excelencia y pone al bebé y a su familia en el centro de la actividad. En España, la Unidad Neonatal del Hospital Joan XXIII fue pionera en la aplicación del método canguro, que ofrece desde el año 1994.