El pasado viernes 10 de noviembre, el Hospital Universitario Joan XXIII de Tarragona celebró su primera jornada de comunicación, conmemorando el 50 aniversario del centro sanitario. El gabinete de comunicación de la institución sanitaria, dirigido por Montserrat Salvador, organizó un programa que contó con la participación de profesionales sanitarios y del mundo científico y con periodistas, con el objetivo de unir “dos mundos profesionales diferentes, pero necesariamente cooperantes, con rutinas diversas y, por lo tanto, con circunstancias desiguales, pero obligados a entenderse”, afirmó el periodista y coordinador de la jornada, Diego Pérez. Más de 60 personas se inscribieron a una jornada acreditada por el departamento de Formación del ICS Camp de Tarragona.

 

El gerente territorial del ICS Camp de Tarragona, Rafael Gracia, inauguró la jornada que contó, como ponentes, con periodistas como Toni Orensanz, Sara Sans, Karla Islas, Esteve Giralt, Norian Muñoz, Yolanda Garcia y Oliver Márquez, que compartieron debate con profesionales como el director del Instituto de Investigación Sanitaria Pere Virgili (IISPV), Joan Vendrell, la directora de comunicación del ICS, Eva Peruga, el coordinador de la investigación en Atención Primaria del ICS Camp de Tarragona, Josep Basora, o el gerente de la Fundación Privada PortAventura, Joan Adserà, entre otros. La organización de la jornada también dió voz a los pacientes con la participación, también como ponente, de la representante de la Asociación de Trasplantados Hepáticos de Cataluña, Eva Vallvé. El director del Hospital Joan XXIII, Albert Pons, hizo la conclusión.

 

Los debates y las opiniones, diversas y muy interesantes, que surgieron durante la jornada, coincidieron en la necesidad de fortalecer aspectos cómo: la profesionalidad y la ética de trabajo, tanto desde el punto de vista individual como de las organizaciones, la humanización de las organizaciones, en referencia a la gestión de las personas y, también, en cuanto a la emisión de mensajes y de informaciones, y la capacidad para potenciar la comunicación emocional sin pisar la ética profesional y los derechos de las personas. La organización de la jornada anunció la voluntad de dar continuidad a este proyecto los próximos años.