El relato de superación, aprendizaje y gratitud de Laura pone de relieve el vínculo cercano con los profesionales del Hospital Joan XXIII.
Laura pasó ocho meses ingresada en el Hospital Universitari Joan XXIII de Tarragona para afrontar y superar la leucemia. Durante este tiempo en el Área de Hematología, vivió un proceso que ella misma define como un “proceso de sanación”, en el que aprendió a aceptar la realidad y a vivir cada momento con plena conciencia. “En este recorrido comprendí que no se trataba de luchar contra la enfermedad, sino de aceptar la vida tal como es. Si me estaba pasando esto, debía encontrarle un significado y aprender todo lo posible de ello”, explica Laura.
A lo largo de toda su estancia, contó con el apoyo constante del equipo de Hematología. Marta Cervera, médica del Servicio de Hematología del Hospital Joan XXIII, describe a Laura como “una paciente muy especial, agradecida y con una actitud positiva, que ha superado situaciones muy complejas, con fuerza y conciencia”. La cercanía y el acompañamiento a los pacientes son esenciales durante ingresos prolongados y tratamientos intensos, y Laura destaca especialmente la atención y dedicación de todo el personal médico, de enfermería y del servicio.
Uno de los momentos más simbólicos de su recorrido fue tocar la campana situada en el Área de Hematología, un gesto que marca la finalización del tratamiento y simboliza la culminación de un largo proceso. Para Laura, este momento supuso “una sensación de triunfo y alegría, no por haber vencido la enfermedad, sino por haber completado este proceso”. Su mensaje para los pacientes que afrontan situaciones similares es claro: abrazar la enfermedad, aceptar la realidad, vivir el aquí y el ahora y aprender de cada experiencia.

