La simulación clínica es una importante herramienta de aprendizaje. Su eficacia para la formación de personal sanitario está más que demostrada, y cuenta con numerosos trabajos publicados que lo avalan. Con la simulación se pueden entrenar técnicas cruentas y poco frecuentes sin peligro para los pacientes. Se puede entrenar el manejo de situaciones frecuentes y de situaciones poco frecuentes y críticas que requieren de un tratamiento complejo. También está demostrado el acortamiento de la curva de aprendizaje de diversas técnicas con la formación previa mediante la simulación. Y permite trabajar las competencias nombradas no técnicas como son el liderazgo, el trabajo en equipo y la comunicación entre miembros de un equipo multidisciplinar.

Este año desde la Comisión de docencia hemos propiciado la incorporación de la simulación clínica el Curso de Urgencias con 5 casos que se han realizado en la Unidad de Reanimación y se han transmitido a un aula del edificio de docencia e investigación. Dos residentes de primer año, uno de medicina familiar y uno de medicina hospitalaria se han enfrentado a un caso estandarizado de urgencias. Se han trabajado temas como la disnea, el dolor torácico, el manejo inicial del choque séptico, el ictus o el síncope.

La realización de esta iniciativa ha sido fruto de una colaboración multidisciplinar encabezada por el Dr. Cristóbal Añez, Jefe de Estudios de FSE del HJ23 en la que han colaborado el Diego Gil, informático, el servicio de Urgencias encabezado por la Dra. Carmen Boque, el Servicio de Anestesiología y Reanimación encabezado por el Dr. D Pelegrí y todo el personal de la Unidad de Reanimación: anestesiólogos, enfermeras y auxiliares.